jueves, 28 de junio de 2018

El Castillo de los Tres Reyes del Morro: la historia viva





El Castillo de los Tres Reyes del Morro fue diseñado en las últimas décadas del siglo XVI por el ingeniero Bautista Antonelli, con miras a la protección de la Villa de San Cristóbal de La Habana. Junto al faro que lo acompaña, es símbolo de esa ciudad y de Cuba.

Desde las alturas del Castillo, emplazado en un risco de la entrada del puerto, podía visualizarse la primitiva villa, por ello se convirtió en el principal punto de contacto con las demás defensas. Esta condición hizo que la fortaleza constituyera la primordial custodia de la urbe hasta la construcción de La Cabaña, en el último tercio del siglo XVIII.

Durante los años 90 del siglo XX se realizaron labores de rescate y conservación de toda la obra, y, a partir de entonces, sus espacios se transformaron en galerías de arte, escenarios de eventos culturales, que convirtieron al baluarte en un popular atractivo cultural y turístico de La Habana.


El Castillo de los Tres Reyes del Morro de La Habana adopta este nombre para evocar por una parte a los tres reyes magos y, por otra, a la porción de terreno donde se encuentra enclavado, alto, rocoso, escarpado, aislado y a la orilla del mar. En real cédula del 10 de diciembre de 1588, el rey Felipe II aclara cómo debía llamarse este fuerte, y el de San Salvador de la Punta. Una real cédula del 20 de marzo de 1614 hace constar que en la primavera de ese año quedaba terminada la capilla del castillo y en su altar tenía ¨... un retablo de la adoración de los Reyes que era la vocación del castillo¨.

Actualmente el visitante puede llegarse a esta maravillosa arquitectura y ser testigo de primera mano de la imponencia de una de las construcciones coloniales más bellas de toda América.

La guayabera cubana: un símbolo de nuestra tierra




Portadora de historia y valores como ninguna otra prenda en Cuba, la guayabera constituye una de las más valiosas tradiciones de la Mayor de la Antillas, extendida hoy dentro y fuera de sus límites.
Aun cuando su origen continúa siendo un incógnita, la mayor parte de la bibliografía asegura que fue precisamente en Sancti Spíritus donde se confeccionó la primera a inicios del siglo XVIII por un matrimonio de inmigrantes andaluces.

Desde entonces, el uso de ese tipo de camisa se ha extendido tanto para ocasiones protocolares como informales por su combinación de elegancia y comodidad en el clima tropical que predomina casi todo el año en la Isla.

Por sus características y valores culturales, la guayabera se estableció desde 2010 como prenda de vestir del ceremonial diplomático del Estado y el Gobierno, considerada por la Gaceta Oficial de la República 'una de las más auténticas y legítimas expresiones de cubanía'.
Entre sus características de rigor, la prenda nacional posee bordes y aberturas que la distinguen de una camisa común, así como una veintena de botones y filas de cinco pliegues -dos al frente y tres en la espalda- en forma de alforzas.

Su composición también parece cargada de simbolismos, asegura Carlo Figueroa, director de la Casa Museo Guayabera, institución ubicada en Sancti Spíritus y dedicada a la promoción y preservación de la prenda y donde se exhibe la mayor colección de la isla.


Según explica, desde sus inicios, la camisa recordaba a la bandera cubana pues tanto en el frente y la espalda un canesú en forma de triángulo y las hileras de alforzas típicas recuerdan al símbolo nacional.

Por si fuera poco, la historia cubana recoge el uso de la prenda por personalidades de la historia y la cultura cubanas, entre los primeros, el espirituano José Miguel Gómez, presidente de la República entre 1909 y 1913, quien popularizó su uso en la capital.


Más de 250 de esas piezas y las historias de sus portadores conforman el catálogo de la también llamada Casa de la Guayabera, entre ellas la que usara Fidel Castro en la Cumbre de las Américas celebrada en Cartagena de Indias, Colombia, una de las pocas ocasiones en que no vistió su uniforme verdeolivo.

Además se incluyen camisas de la bailarina Alicia Alonso, los escritores Gabriel García Márquez, Miguel Ángel Asturias y los exmandatarios Hugo Chávez y Rafael Correa, Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz, los Cinco Héroes cubanos o Danny Glober, actor y activista norteamericano.

miércoles, 27 de junio de 2018

El sabor de la tradición: Havana Club




El ron Havana Club se comercializa desde 1934. Pero su historia se remonta a 1878, año en el que José Arechabala abrió la destilería “La Vizcaya” en Cárdenas, Matanzas. Fundado en 1878 como “La Vizcaya” por un inmigrante español de 31 años de edad, “Industrias Arechabala creció hasta convertirse en la ciudad de Cárdenas en el mayor empleador y una de las empresas más importantes de Cuba.

José Arechabala originario de Bilbao, Viscaya, con 15 años, llega a La Habana en 1862. Conocido como un hombre de carácter y valor moral, dieciséis años después de su llegada, entró en el negocio por sí mismo, y maneja una pequeña destilería en la ciudad que había seleccionado para asentar a su familia y buscar fortuna. Cárdenas era entonces una ciudad nueva y llena, con un gran ferrocarril, un puerto de mucho comercio y la nueva riqueza visible en todas partes. En 1888 su compañía había crecido tanto que era capaz de seguir prosperando a pesar de sufrir una pérdida de más de $ 50,000.00 en concepto de daños causados ​​por un terrible ciclón que castigó el municipio en ese año.


En 1921 la sociedad cambia su nombre por el de “Compañía José Arechabala S.A. Contaba con los más modernos equipos, amplias secciones de fermentación, depósitos y cómodas instalaciones. Almacenes de azúcares crudos y refinados, refinería, destilería, elaboración de confituras, siropes, alcoholes, mieles, terminal marítima para sus exportaciones, etc. Entre otras líneas de la destilería, puede destacarse el “mofuco”, inmejorable carburante que comenzó a producirse en marzo de 1932. Esta firma se considera pionera en la elaboración de un carburante nacional, utilizando el alcohol como base.

El 19 de marzo de 1934 se inaugura una nueva fábrica y aparece un nuevo producto: RON HAVANA CLUB. Solo la planta de destilación, en 1950, ya tenía la capacidad de producir 125,000 litros diarios de rones especiales e inmejorables, como el RON HAVANA CLUB y AÑEJO 75 ARECHABALA. En 1935 inaugura, en el palacio de los Condes de Bayona en la Plaza de la Catedral de La Habana, su bar privado y las oficinas de esta compañía.

En 1993 se crea la Empresa Mixta Havana Club Internacional S.A., producto de la unión de la Empresa Cubana Cuba Ron S.A. y el Grupo Francés Pernod Ricard, creándose la unión necesaria para la introducción plena de Havana Club en el Mercado Internacional. A partir de 2003, Havana Club Internacional S.A. se encarga de la distribución de la marca en el mercado cubano junto a las grandes marcas internacionales del Portafolio Pernod Ricard seleccionadas para este mercado.


Con la puesta en marcha en el 2007 de la nueva ronera en San José de la Lajas, Havana Club Internacional S.A. se consagra por primera vez a la producción del ron, asegurando así los ambiciosos objetivos de ventas internacionales a mediano y largo plazo. Desde 1994 Havana Club se convierte en una marca prioritaria para el Grupo Pernod Ricard, constituyendo en la actualidad una de las marcas claves del Grupo.

Havana Club, el ron de Cuba, es la mezcla de tradiciones paralelas desde los productores de rones de más de cuatro siglos, la coctelería y el histórico cruce de culturas. Es el puro producto de esta tierra y de la historia de un pueblo, único desde muchos puntos de vista. La marca definida como el ron de Cuba, indica más que un origen, una identidad y un modo de vivir.

martes, 26 de junio de 2018

Viñales: un oasis de tranquilidad



Viñales es un pueblo tranquilo, situado a unos 26 km al norte de Pinar del Río en el centro de la provincia. Su historia remonta a 1878. En sus primeros años Viñales fue el refugio de un gran número de esclavos fugitivos (cimarrones).

A unos 200 km de La Habana, Viñales Cuba es un lugar ideal para recrearse y descubrir la maravillosa naturaleza en los alrededores de esta pequeña ciudad en Cuba occidente.
El pueblo se sitúa en el Valle de Viñales en la Cordillera de Guaniguanico y se caracteriza por los llamados Mogotes que son impresionantes montañas de piedra caliza en forma de cono que se levantan en un valles verde y fértil.

Fidel castro una vez llamó Viñales como su lugar favorito en Cuba. Ahora es Monumento Nacional de Cuba y en 1999 la UNESCO lo declaró Patrimonio de la Humanidad.
Desde los inicios de su colonización Viñales fue un lugar importante para el cultivo de los mejores tabacos del mundo. 

La producción de tabaco y la industria tabacalera emplean a más de 8000 personas de la región.
Aquí se procesa el tabaco de estilo cubano. Esto significa que la mayoría de los pasos se lleva a cabo de forma manual. Se dice incluso que la forma industrial para explorar la tierra daña la calidad del tabaco.

En los últimos años Viñales se ha convertido en uno de los lugares turísticos más importantes del país. El paisaje del Valle de Viñales es único e invita al viajero a descubrir sus encantos caminando, montando a caballo o montando en bici.

viernes, 22 de junio de 2018

Un regalo de la naturaleza: las cuevas de Saturno



A unos 12 km de Matanzas, Cuba en dirección Varadero se encuentra una gruta a la que aflora un lago de aguas cristalinas conocida con el nombre de Cueva Saturno. Para llegar hasta ella hay que dirigirse al Aeropuerto de Varadero y coger un ramal que lleva a la costa, muy cerca del poblado de Carbonera. Allí se encuentra bien señalizado un centro turístico.

Se observan abundantes estalagmitas y estalactitas. El lago tiene una profundidad de 18 metros pero sus aguas son de una transparencia tan increíble que permiten ver el fondo sin dificultad alguna. Muchas estalagmitas están sumergidas de forma parcial o total, lo que quiere decir que en tiempos pasados la cueva no estaba inundada.

Cuenta con dos galerías en las que se han encontrado peces y camarones ciegos nadando en sus aguas, especies comunes en las aguas subterráneas cubanas, pero también hay aguas limpias que los turistas puedes aprovechar para nadar, practicar snorkel y buceo.

Hay un pequeño kiosko construido cerca de los escalones que penetran en la tierra así que ahí puedes comer y beber entre el resto de las personas que llegan en excursiones guiadas desde Matanzas o Varadero.

Viaje al pasado, en La Aldea Taína.

  Cuba es un archipiélago pequeño, pero lleno de historias y de culturas entremezcladas . La comunidad primitiva tuvo un triste f...